SUPERE EL ¡PANICO!

Es una reacción de alarma con un vehemente deseo de escapar hacia un lugar seguro. Los ataques de pánico se componen de breves episodios de angustia acentuada y múltiples síntomas físicos que ocurren repetida e inesperadamente, con o sin la presencia de una amenaza externa.

Un primer ataque de pánico suele presentarse bajo condiciones extremas de stress, sobre todo cuando la circunstancia traumática desconcierta y atrapa a la persona por sorpresa. Lo imprevisto del suceso induce sentimientos de catástrofe y desolación.



El tratamiento de los ataques de pánico es prevenir que se repitan. La hiperventilación produce síntomas similares a los que preceden los ataques de pánico tales como la angustia, las sensaciones de mareo, aturdimiento y los latidos acelerados del corazón. Educar la respiración ayuda a controlar el pánico. Es por ello importante que en la emergencia la persona tome unos segundos para respirar lenta y profundamente.

Para evitar esto solo respire y mientras lo hace asegúrese de que su mente se relaje completamente e imagine estar en un lugar lleno de calma, lleve su mente a una situación que lo haga sentirse muy feliz, confiado, pausadamente, vuelva a respirar, visualizando siempre algo hermosos, una playa, una montaña, un riachuelo. Distráigase caminando lugares bellos, comprando en centro comerciales, acuda a un spa para que le den un buen masaje, reúnase con amigos alegres. ¡Viva la vida como un chiste! SEAN FELICES.